La Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA) comenzará 2026 con un relevo completo en su estructura directiva. La Honorable Junta de Gobierno designó al Maestro en Derecho Juan Carlos Arredondo Hernández como rector para el periodo 2026-2028, después de un proceso que incluyó votación de la comunidad universitaria y una evaluación cualitativa de las ternas finalistas. El nombramiento se formalizará el 1 de enero.
Trayectoria del nuevo rector de la UAA
Arredondo llega al cargo con una trayectoria de más de treinta años dentro de la institución. Desde 1992 ha sido profesor en distintas licenciaturas y ha ocupado la jefatura del Departamento de Derecho. Su trabajo profesional se ha desarrollado principalmente en el ámbito jurídico laboral y forma parte de la Academia Mexicana de Derecho del Trabajo.
También ha tenido participación en la vida institucional: en 2007 fue Defensor de los Derechos Universitarios de manera interina, experiencia que reforzó su cercanía con los procesos internos de la UAA. A lo largo de los años ha recibido diversos reconocimientos por su labor docente.
Junto con el rector, la Junta de Gobierno nombró a los diez decanos que encabezarán los centros académicos durante el mismo periodo. La lista incluye a Luis Fernando Cisneros Guzmán (Ciencias Agropecuarias), Guillermo Domínguez Aguilar (Ciencias Básicas), Jaime Gonzalo Santana Esquivel (Ingeniería), Sergio Ramírez González (Ciencias de la Salud), Ma. Guadalupe Lira Peralta (Diseño y Construcción), Ismael Rodríguez Herrera (Ciencias Económicas y Administrativas), Guillermo Miramontes Acevedo (Ciencias Empresariales), Alejandro García Macías (Ciencias Sociales y Humanidades), Ismael García González Cosío (Educación Media) y Blanca Elena Sanz Martin (Artes y Cultura). Todos rindieron protesta el mismo día de su designación.
Con este conjunto de nombramientos, la UAA inicia un periodo que combina continuidad académica con la expectativa de ajustes en sus procesos internos. El rector y los decanos tendrán a su cargo la operación de los programas institucionales y la responsabilidad de atender las demandas de una comunidad universitaria en crecimiento.
Aunque aún no se han detallado las prioridades de gestión para el nuevo periodo, los perfiles académicos y profesionales de quienes asumen los cargos apuntan hacia una administración enfocada en consolidar el trabajo previo y responder a los retos actuales de la educación superior en el estado, pero también de imagen pública y reputación institucional.