La historia de don Roque Ortega, es un viaje empresarial y culinario que trasciende las fronteras de los fogones.
Desde los pasillos de las cadenas hoteleras más prestigiosas de México hasta las mesas de su propio Museo- Restaurante, su trayectoria es un testimonio de dedicación y amor por su oficio.
Su paso como director de Finanzas y Administración por gigantes de la hotelería como Quinta Real, Camino Real, Presidente, Westin Regina y Radisson, lo forjó como un líder visionario. Capaz de navegar con éxito en un sector altamente competitivo.

La constancia, la pasión y un profundo sentido de pertenencia fueron sus brújulas en cada proyecto. Permitiéndole adquirir una experiencia invaluable en negociaciones, aperturas y rebranding de hoteles. Ejemplo de ello es su permanencia de poco más de 13 años en Grupo Islo, lugar que da valor agregado a su carrera profesional.
La leyenda de Roque Ortega
Sumado a lo anterior, la creación de “La Leyenda”, un Museo- Restaurante que fusiona la gastronomía con la historia y la cultura de Zacatecas, es un sueño hecho realidad. Este proyecto es el resultado de años de pasión por la buena comida, la colección de piezas únicas y la búsqueda de experiencias auténticas.
Su vida es testimonio de disciplina y dedicación. Con su icónica frase: ”Desde hace 43 años no fumo, no bebo y no tomo refresco de cola” Roque Ortega nos revela el secreto detrás de su éxito.
Esta elección de vida le ha permitido concentrar toda su energía en su pasión. Su compromiso inquebrantable lo ha llevado a escalar posiciones en la industria hotelera y a crear un espacio único como “La Leyenda”. Donde la historia, el arte y los sabores se fusionan en una experiencia inolvidable.
Aquí cada platillo es una obra de arte y cada rincón cuenta una historia. Su mensaje es claro: la gastronomía es mucho más que comida, es una forma de conectar con las personas, con la cultura y con nuestras raíces.

La trayectoria de Roque, destacado profesional, es una inspiración para todos aquellos que buscan dejar una huella en el mundo. Su historia nos recuerda que con pasión, dedicación y un toque de creatividad podemos materializar nuestros objetivos.