La historia de Gucci comienza en Florencia, el 26 de marzo de 1881, con el nacimiento de Guccio Gucci. Desde joven, su curiosidad por el mundo del lujo lo llevó a mudarse a Londres en 1897, donde trabajó como portero en el elegante hotel Savoy. Allí observó de cerca los hábitos y el estilo de la alta sociedad internacional, especialmente el equipaje que acompañaba a los viajeros. Esta experiencia sembró en él el deseo de crear productos que llevaran su nombre y representaran sofisticación y calidad.
Los inicios de Gucci
En 1921, Guccio regresó a Florencia y abrió su primera boutique en la Via della Vigna Nuova, especializada en equipaje de estilo inglés. Su propuesta combinaba la artesanía toscana con la estética refinada que había observado en Londres. Durante los años 30, introdujo la lona Diamante, precursor del icónico monograma GG que se mantiene en la actualidad.
A mediados de los años 40, la marca incorporó el bambú en sus diseños, inspirado en los bastones de equitación de su hijo. Este detalle se consolidó con la bolsa Gucci Bamboo 1947, un clásico que sigue vigente. Para 1953, Gucci expandió su presencia fuera de Italia, inaugurando su primera tienda en Nueva York y presentando el mocasín Horsebit 1953, un accesorio que evocaba la vida ecuestre. Ese mismo año, la firma adquirió el histórico Palazzo Settimanni en Florencia para centralizar su producción artesanal. 
Durante las décadas de los 50 y 60, Gucci creció rápidamente y ganó notoriedad entre la élite internacional. Se consolidaron productos y estampados emblemáticos, como el diseño Flora y el predecesor de la bolsa Jackie 1961. A partir de los años 70, la marca comenzó a producir ropa ready-to-wear y abrir tiendas dedicadas a vestimenta, destacando su primera en 699 Fifth Avenue, Nueva York, 1972. En 1981, Gucci presentó la colección inspirada en Flora en Florencia, ampliando además su gama de artículos de estilo de vida.
Gucci en la actualidad
El final del siglo XX introdujo la era de directores creativos, desde Tom Ford (1994) hasta Demna (2025), quienes aportaron nuevas perspectivas manteniendo el legado de la marca.
Hoy, Gucci es un referente en moda de lujo, con perfumes, bolsos y cosméticos que reflejan la visión original de Guccio: combinar calidad, diseño y estilo. La marca mantiene su prestigio mundial, demostrando que el sueño de un joven portero florentino se transformó en un imperio que perdura por más de un siglo.
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