Desde 1836, el Centro Histórico de Zacatecas se engalana cada año con un desfile que se ha convertido en una tradición emblemática de la región: las Morismas de Bracho. Este evento, en honor a San Juan Bautista, reúne a 20,000 personas que se visten de moros y cristianos para representar batallas históricas y religiosas.
San Juan Bautista
San Juan Bautista es una figura central en el cristianismo, conocido por su misión de preparar el camino para Jesucristo. Nació milagrosamente de Zacarías e Isabel, y su vida fue anunciada por el ángel Gabriel. Predicó en el desierto de Judea sobre el arrepentimiento y el Reino de Dios, y es especialmente recordado por bautizar a Jesús en el río Jordán, marcando el inicio del ministerio público de Jesús.
El historiador Bernardo del Hoyo Calzada explicó que la imagen de San Juan Bautista no tuvo una cofradía hasta 1824, cuando 14 vecinos zacatecanos formaron una congregación que creció hasta 300 participantes. La asociación fue elevada al rango de Cofradía de San Juan Bautista en 1855 y se celebró por primera vez en Lomas de Bracho.
2024, el año de Moros y Cristianos
En conmemoración de los 200 años de las Morismas de Bracho, se declaró el 2024 como el año de Moros y Cristianos. Durante el nombramiento, se presentó un cartel especial y se reconoció a los grupos de cofrades responsables de la representación religiosa y cultural. En el evento, se rindió homenaje a compañeros fallecidos, como Rodrigo Araujo Huitrado, con un reconocimiento entregado a sus hijos.
Origen de las Morismas de Bracho: Raíces Medievales y Adaptación en México
Las Morismas de Bracho tienen sus raíces en las celebraciones medievales europeas que recreaban las luchas entre musulmanes y cristianos. Introducidas en México por los españoles durante la época colonial, estas festividades se han adaptado al contexto zacatecano, convirtiéndose en una rica expresión cultural que mezcla historia, religión y tradiciones locales.
Cada año, en la primera semana de septiembre, la comunidad de Bracho, ubicada a las afueras de Zacatecas, se transforma en un escenario de recreaciones históricas. Miles de participantes, vestidos con elaborados trajes que representan a soldados moros y cristianos, participan en combates simulados, marchas y actos ceremoniales. El evento se desarrolla a lo largo de varios días, donde se llevan a cabo desfiles por las principales calles del Centro Histórico antes de llegar al cerro de Bracho. Aquí, las actuaciones más significativas y espectaculares tienen lugar, culminando en una gran batalla en la que los cristianos vencen a los moros, simbolizando la victoria del cristianismo.
Importancia cultural de las Morismas de Bracho y conexión con la comunidad
Las Morismas de Bracho son mucho más que un espectáculo teatral. Representan una manifestación profunda de identidad cultural y religiosa para los habitantes de Zacatecas. Los participantes y espectadores ven en esta festividad una oportunidad para honrar a sus antepasados, expresar su fe y fortalecer los lazos comunitarios. La festividad no solo atrae a locales, también a turistas que se maravillan con la dedicación y autenticidad de las representaciones. Además, el evento promueve la economía local, con un aumento significativo en la ocupación hotelera y la actividad en restaurantes y comercios.
El impacto de las Morismas de Bracho en la comunidad es notable. Las preparaciones para el evento comienzan meses antes, involucrando a familias enteras y a diferentes sectores de la sociedad zacatecana. Desde la confección de trajes hasta los ensayos de las representaciones, la festividad moviliza a la comunidad, fortaleciendo el sentido de pertenencia y cohesión social. La participación de niños, jóvenes y adultos en las actividades refleja la transmisión intergeneracional de esta tradición, asegurando su continuidad.
Esta festividad logra mantener viva una tradición que refleja la mezcla de influencias culturales y religiosas en México, consolidándose como un evento de gran importancia tanto para la comunidad local como para el patrimonio cultural del país.
Por Denise Santana.